Los municipios han declarado que ya no tienen la capacidad económica, técnica ni la logística para enfrentar el desastre
La reunión fue realizada la noche de este miércoles en San Ignacio de Velasco
A más de un mes del desastre en la Chiquitania, causado por los incendios forestales, siete alcaldes de municipios devastados se reunieron este miércoles en San Ignacio de Velasco y piden una reunión urgente con el presidente, Evo Morales y el Gobernador, Rubén Costas.
La consigna es enfrentar entre los tres niveles de gobierno de forma coordinada y planificada, las consecuencias que está dejando la tragedia en el bosque seco chiquitano y ayudar a las familias afectadas.
En el pronunciamiento califican lo sucedido como un «evento catastrófico» que ha dañado sembradíos, animales del bosque y todo el ecosistema de la región, dejando daños irreparables e irreversibles que pueden agravarse aún más pues hasta ahora los incendios no cesan.
«Instamos a las autoridades departamentales y nacionales a la brevedad posible reunirse en nuestra región a objeto de ejecutar acciones y planes inmediatos de contingencia para dar solución a nuestros problemas a corto plazo y definir estrategias de restitución del bosque en un mediano y largo plazo», dice el documento firmado por los alcaldes.
Los escasos recursos económicos en cada municipio «se han agotado», insistió el alcalde de San Ignacio, Moisés Salces, pues se ha afectado otros presupuestos y dejando obras programadas sin ejecución en comunidades y barrios para atender la emergencia. Ahora no se tiene la capacidad económica, técnica y logística para enfrentar el desastre.
A la cita convocada por el alcalde de San Ignacio en La Misión Hotel, asistieron los ediles, David Mollinedo (Concepción), Armando Barbery (San Javier), Fabio López (San Matías), Ignacio Surubí (San Antonio de Lomerío), Julio Alviz (San Rafael) e Iván Quezada de Roboré.
Incendios los encontraron desprevenidos
El alcalde de San Rafael de Velasco, Julio Alviz, manifestó que el incendio ha encontrado desprevenidos a los tres niveles de gobiernos, porque no hubo personal capacitado para apagar el fuego descontrolado por los chaqueos, no hubo oportunamente la atención con logística para que el fuego no avance.
El municipio rafaeleño ahora tiene problemas graves de agua no solo en el área urbana, sino, también en lo rural.
Dentro de la emergencia se necesita cisternas para asistir a zonas afectadas. «después de la ayuda solidaria de Bolivia y de otros países amigos, vamos a quedarnos solos nuevamente y por eso necesitamos elaborar un plan de contingencia post incendios, dijo Alviz. (Eldeber).
Deja un Comentario