“Comunicación y Eucaristía para superar la falta de comunión en la familia”. En la Eucaristía de clausura del Encuentro Latinoamericano del Movimiento Familiar Cristiano, el Arzobispo de Santa Cruz, Monseñor Sergio Gualberti señaló que “la falta de comunicación impide la comunión entre esposos y entre padres e hijos” por lo que agregó que ante los problemas de la familia, contamos con la Eucaristía, el alimento que nos une y nos llama a la reconciliación para superar toda división y discordia.
“Hoy vivimos una profunda falta de comunicación que impide la comunión y la relación entre personas. Se lo constata en la misma familia entre esposos y entre padres e hijos, entre vecinos, entre amigos, en el ambiente laboral y entre grupos de la sociedad” denunció el Prelado Cruceño.
Este domingo 19 de agosto en horas de la tarde, el Arzobispo de Santa Cruz, Monseñor Sergio Gualberti, presidió la Eucaristía de clausura del Encuentro Zonal Latinoamericano del Movimiento Familiar Cristiano que se realizó en la Arquidiócesis de Santa Cruz del 17 al 19 de agosto en los predios de la FEXPOCRUZ y la Parroquia San Martín de Pórres.
Siguiendo el Evangelio del domingo, el Prelado habló de Jesucristo “Pan vivo bajado del cielo” y aseguró que con su presencia en la Eucaristía “vivimos la fiesta y la alegría de una relación exclusiva que nos hace uno con Jesucristo, una comunión inquebrantable y existencial. Es todo y el mismo Cristo que cada uno de nosotros recibe al comulgar en la Santa Misa y, al unirnos a él y a Dios Padre, nos unimos también entre hermanos, porque juntos formamos el cuerpo de Cristo, la Iglesia” señaló.
En ese sentido y refiriéndose a la situación, las dificultades y las amenazas que sufre la familia en la sociedad de hoy, señaló que contamos con la Eucaristía, el alimento que nos une y nos llama a la reconciliación para superar toda división y discordia.
A tiempo de señalar que “No podemos decir que estamos en comunión con Dios a quien no vemos, si no estamos en comunión con el prójimo que vemos” agregó que “Hoy vivimos una profunda falta de comunicación que impide la comunión y la relación entre personas. Se lo constata en la misma familia entre esposos y entre padres e hijos, entre vecinos, entre amigos, en el ambiente laboral y entre grupos de la sociedad”.
En ese mismo sentido agregó que “La relación interpersonal a menudo es superficial, interesada, oportunista; por eso la comunión entre las personas es débil y no nos enriquece mutuamente” señaló.
El Prelado también lamentó que a veces “Hay indiferencia ante el dolor y la angustia ajena y se hace muy difícil apasionarse e interesarse por la misma causa, por los valores e ideales de una sociedad justa, libre y solidaria, donde todos tengan condiciones de vida digna”.
Remarcó con energía que “Ante esta situación, contamos con la Eucaristía, presencia real de Cristo, el don para que todos y no sólo algunos, vivamos la comunión con Dios y los hermanos. Para ser testigos creíbles de este misterio supremo del amor de Dios providente hacia todo ser humano hay que asumir un compromiso concreto de solidaridad y de cercanía fraterna con los demás, en particular con los pobres, los marginados y los necesitados que están a nuestro lado”.
El Movimiento Familiar Cristiano, un Movimiento de puertas abiertas en salida para llamar, formar y enviar.
De este evento internacional participaron 200 familias, venidas de varios países. Paralelamente se tuvo el EZO 2018 de los jóvenes emefecistas donde participaron 150 jóvenes delegados que se congregaron en la “Casa Campestre, Las Lomas” en el Urubó.
El Padre Miguel Córdova, Asesor Eclesial MFC Bolivia, destacó la importancia de este Encuentro ya que se trataron temas “que ayudan a fortalecer a las familias, ya que las mismas se constituyen en uno de los pilares más importantes de los pueblos latinoamericanos, y patrimonio de la humanidad entera”.
El Encuentro internacional denominado EZO 2018 se desarrolló con el objetivo de “Ser una plataforma que ayude a ver la necesidad de tener una conversión personal, conyugal y familiar y adquirir un compromiso de vivir y dar testimonio de lo que Jesús nos pide en nuestra vida diaria, ofreciendo a la sociedad el carisma del MFC, confirmando ser un movimiento de puertas abiertas”.
Durante estos días se trataron temas relacionados al llamado, formación y envió de la misión en las familias bajo el lema “Movimiento de puertas abiertas en salida para llamar, formar y enviar”.
En la ciudad de Santa Cruz el MFC es una organización laica sin fines de lucro, que tiene por objetivo Promover los valores humanos y cristianos de la familia en la Comunidad, para que la misma sea formadora de personas y Defensora de la Vida. Están dedicados sus diferentes grupos a formar a los futuros matrimonios, como también de acompañar en su crecimiento conyugal.
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