En La ciudad de Santa Cruz, del 24 al 26 de octubre se realiza el EMO 2018. Representantes de obras y parroquias de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada se encuentran reunidos para reflexionar sobre la misión y su incidencia en la realidad actual.
Unas 40 personas llegadas de Oruro, Norte Potosí, Cochabamba y Santa Cruz, cuentan sus experiencias y comparten de qué forma están dando respuestas a los problema actuales. Además de vieron la necesidad de crear una red de acción con algunos desafíos que deben ser trabajados conjuntamente.
Durante estos días analizaron la realidad, la coyuntura de forma critica, para lo cual invitaron al Lic. Nelson Jordán Bazán, que desde su mirada pudo enfocar los focos desafiantes, y los clamores de los rostros, que esperando mejor sus vidas. Además de los datos y realidades, permitió crear un debate sobre la visión de país.
Pero en vista que las obras y parroquias oblatas están metidos en la realidad nacional, y consideran la misión como el desafío a responder. Fue asi que el P. Luis, J. López, quien desde su experiencia en el V CAM y de acompañar procesos misioneros, presento la conclusiones de el Congreso vivido en Julio de este año. Lo cual fundamentalmente nos invita a ir a las periferias, a encarnar el Evangelio en la vida concreta y a ratificar la actitud sencilla y cerca a la gente.
Los misioneros Oblatos de María Inmaculada estan trabajando en los centros misneros desde el año 1952 y aun participan de esta misión, pero acompañados de la Radio Pio XII y de la audacia de sus misioneros. Defendiendo los derechos de los pobres y anunciando el Evangelio de la vida.
Es asi que el P. Enrique Jordá, que presepre su experiencia en medio de los pueblos indígenas de la amazonia Bolivia, concretamente en Moxos, Guarayos y el Tipnis. El P. Jordá presentó los desafíos que se tienen cuando se va trabajando con los pueblos indígenas, y más aún si se comprometen a defender los recursos naturales y el cuidado del medio ambiente.
Este encuentro concluyó el día viernes 26 de octubre con la presentación de un plan de acción que les permita tanto a las obras sociales y parroquias oblatas, para que puedan actualizar su presencia misionera y además estar en sintonía con lo que la Iglesia boliviana los pide
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